¿Están los jóvenes españoles sensibilizados con los extranjeros?

Desde hace unos diez años, en España se ha observado un enorme crecimiento en el número de habitantes debido en parte a los inmigrantes que se han establecido en nuestro país. España está pasando a ser un país intercultural en el que personas de todas partes del mundo vienen a visitar este lugar, y otros muchos, vienen a quedarse. 

Quizás hace unos cuarenta años, a los españoles les resultaba demasiado extraño ver a un joven africano, marroquí, sueco, o de otra parte del mundo. Recuerdo que cuando era pequeña y estaba en primaria, con unos seis, siete u ocho años, era muy raro para mí encontrar en mi colegio a un niño de África, o a una chica de Irlanda. Parándome a pensar, con el paso de los años cada vez esto se ha hecho más cotidiano e incluso al día de hoy no resulta nada raro encontrar por la calle a un grupo de extranjeros haciendo visitas turísticas, o ¡cómo no!, lo que desde hace unos cinco años está siendo una potencia comercial, los mercados de chinos. 

El hecho de que muchos extranjeros vengan y se queden en este país cambia por completo la economía, la vida laboral, la socialización, las creencias, e incluso la ideología general del país. Con esto quiero referirme a que muchos inmigrantes llegan aquí y tienen que encontrar un trabajo para mantenerse, y en algunos casos los españoles se quejan de ésto porque argumentan que "un extranjero viene aquí a quitarme un puesto de trabajo a mí". Por otra parte, nos estamos criando y conviviendo con personas de otras culturas, y al relacionarnos conocemos las diferentes ideologías, costumbres, maneras de vestir, etc., cosa que nos ayuda a ampliar fronteras y a no ver a los inmigrantes como "invasores" o personas que vienen a quitarnos nuestro sitio. 

Pero, ¿qué piensan los españoles sobre estar relaciones internacionales?

Un estudio de la Universidad de Granada recoge la opinión de los jóvenes españoles de entre 18 y 29 años, basándome en esto, voy a exponer las diferentes opiniones que se han dado:

A modo general, son más los hombres que las mujeres, los que confían en los inmigrantes y valoran el crecimiento y enriquecimiento cultural que pueden traer al país. Sin embargo, por ambas partes existe  una preocupación por la integración de los extranjeros. 

Donde más se puede percibir un elevado nivel de sensibilización y aprecio por personas de otras culturas y las relaciones con ellos son entre los jóvenes, y las personas que tienen un alto nivel educativo. Parece ser que la educación y los estudios te hace entender que es necesaria, o al menos hay que prestarle atención a otras culturas para enriquecer la nuestra y ampliar horizontes.

Desde el Trabajo Social y las áreas de Competencias Interculturales se promueve el sensibilizar y ayudar a los españoles a que tomen conciencia del asunto y puesta en práctica de lo aprendido. 

Teóricamente, la Sensibilidad Intercultural es definida por Chen y Starosta (1997) como "la 
habilidad individual para desarrollar emociones positivas a través de la  comprensión y apreciación de las diferencias culturales, capaces de  promover comportamientos apropiados y efectivos en situaciones de comunicación intercultural". Una vez que entendemos este concepto, podemos hablar de unas actitudes que se deben tener ante situaciones como en este caso es la inmigración, y que desde el área del Trabajo Social se trabajan, como pueden ser la empatía, la asertividad, mentalidad abierta, empatía, capacidad de no juzgar, entre otras. 

Me sentí muy identificada con este estudio por varios aspectos. Por una parte, porque los datos recogidos muestran que la zona del país donde más sensibilización intercultural se tiene es en Andalucía, y como sevillana me hace valorar la actitud que tenemos en el sur. Por otro lado, el hecho de que el nivel de estudios y la juventud sean factores que condicionen de manera positiva la aceptación de otras culturas, hace que me de cuenta la influencia e importancia que ha tenido el trabajar y estudiar con todo tipo de personas. Crecer educándome en una cultura y en un país, pero compartiendo ideas y viendo costumbres de otras es algo muy especial, que puede llegar a cambiar y romper todos tus esquemas. Por último, las actitudes que se tratan en la sesibilización, y las puestas en prácticas, forman parte de la teoría que estudio en el Grado en Trabajo Social, y por lo tanto, me estoy dando cuenta, cada vez un poquito más, de los niveles en los que intervienen los trabajadores sociales y las prácticas que se pueden llegar a realizar desde esta disciplina. 

Personalmente, creo que es muy edificante relacionarnos con todo tipo de personas, y como futura trabajadora social, me puede ayudar a comprender mucho mejor el sentimiento que tienen las personas en según qué circunstancias, y entender qué les puede influir para actuar de un modo u otro. Además, los valores que nos pueden aportar otras culturas no se pueden obtener encerrados en la nuestra. 

Fuente: http://infojove.caib.es/97JOVENES%20Y%20TRABAJO%20SOCIAL_0.pdf